Día de la palabra

El  día 23 de noviembre se celebra el Día Internacional de la Palabra. Por tal razón, escribimos relatos todos incluyen "palabra" en sus líneas. Decía Miguel Delibes que "si las palabras no se las dices a nadie, no son nada".

 

AMOR ETERNO
 

Me dijiste que confiara en ti, que nunca me dejarías caer a pesar de las piedras que encontráramos en el camino, a pesar de mi vértigo a lo desconocido, de mi miedo a desfallecer por la angustia.

Me prometiste que estarías siempre a mi lado, que me llevarías sobre tu espalda, llegado el momento.

...

Después me hiciste cerrar los ojos; que tú me guiarías, me habías dicho y yo confié en ti sin reservas. Segura de que me protegerías hasta el final, te tendí mi mano y a ciegas me dejé guiar. Pero no cumpliste tu palabra. Has soltado mi mano cuando yo más te necesitaba, me has dejado caer.

Ahora nadie sospechará de ti porque tú siempre decías a voz en grito que me querías. Qué bien has planeado mi muerte, seguro que ahora estás llorando lágrimas de cocodrilo.

Ha sido un terrible accidente por el caminito del rey. Sí, un terrible accidente.

 

Lola Cano

 

VERBA VOLANT...

 

Le vi, al fin, llegar y acercarse a mí. Traía las manos vacías, en contraste al abultado equipaje que a mí me rodeaba. “No tengo valor”, acertó a decir.

Yo fui entonces Escarlata O´hara: “No me dejes, Rhet, no te vayas; si tú te vas, adónde voy a ir yo, qué voy a hacer…”. Él era entonces Rhet Butler: “Francamente, querida, a mí eso no me importa”.

Le recordé sus promesas de amor eterno lejos de la realidad de ambos, aquel amor que él decía sentir por mí, inaudito, incontrolable, incontenible, incapaz de vivir lejos de mí por más tiempo, ni por un minuto más, confesaba desesperado. Le traje a colación sus susurros apasionados. Le eché en cara todo cuanto yo dejaba por él. “Las palabras se las lleva el viento”, me dijo al fin. Y tocando con los dedos el ala de su encantador sombrero, me dirigió la última de sus seductoras miradas y se fue.

Hacía frío en la estación, pero mis lágrimas ardían resbalando por mis mejillas y también ardía mi corazón. Mientras se alejaba el tren dejé caer de mis manos los pasajes comprados para aquel viaje sólo de ida que ahora ya era un imposible más. A ellos también el viento se los llevó.

Las estrellas de la noche que aún estaba instalada sobre aquel escenario de huida frustrada caían sobre mí una tras otra. En aquella estación lloré un mar de penas y un océano de desilusiones entre los afanados viandantes que el día traía y llevaba en presurosas cavilaciones y horarios ajustados.

Sí, Escarlata, yo también pienso como tú. La tierra es lo único que perdura. Buscaré mi particular Tara; eso, eso es lo que haré.

El día empezaba a caer cuando me levanté de aquel banco de hierro y comencé a andar en sentido contrario al que se marchó el tren. El viento se enredaba en mi vestido. Las cintas de terciopelo de mi sombrero revoloteaban como palomas en una mañana de primavera.

 

Chony Millán

 

UN AUDÍFONO DISCRETO

 

Teresa era una señora mayor a la que cuidaba. El paso del tiempo hizo que tuviera la necesidad de usar audífono. Pero era tan sumamente presumida, que se resistía ha hacerlo. La convencí porque habían sacado el último modelo en estos aparatos, muy discretos y eficaces. ...
Fuimos al otorrino, y en menos de una semana estaba de nuevo en consulta para proceder a su colocación. Muy discretamente se lo colocaron, inalámbrico como ella pedía y oculto tras su pelo.
Qué maravilla -informó muy feliz al otorrino -. Ahora podré escuchar todas las conversaciones y ese programa de televisión de "Pasapalabra” que tanto me gusta.
Fantástico, entonces estará su familia muy contenta ¿no? -preguntó el médico.
Oh, en realidad yo no se lo he dicho todavía. Y no creo que vaya a cambiar de opinión- concluyó Teresa-.

 

Mercedes  Luque

 

ESO SON LAS PALABRAS

Hoy mi hija de cuatro años me ha preguntado: mamá, ¿qué son las palabras? Me he quedado un poco desconcertada; no se cómo explicarle, para que lo entienda, que las palabras son un arma de doble filo.
Pueden ser el mejor bálsamo para un corazón herido y, a la misma vez, pueden ser el puñal que te desgarre por dentro.
Las palabras pueden crear los versos más hermosos en la voz adecuada o pueden convertirse en la peor de tus pesadillas.
Pueden serlo todo y, a la vez, nada; pero ahora mismo no encuentro las palabras adecuadas para explicárselo a ella y termino diciéndole: hija, las palabras son eso, palabras.

Pepi Gallardo

Sí o no

Tan solo un segundo, -Sí, no, no, sí... Un segundo de tiempo...y decir Sí y luces naranjas, luces azules.. gritos y el silencio... El sonido del corazón que se apaga, una luz al final de un túnel sin peaje, donde ya no puedes llevarte nada, solo tu esencia.
...

Saltar al vacío o permanecer en tierra. Evadirte de esos problemas o solucionarlos...

La voz se repite -Sí, no, no sí... Silencio. Contar lentamente, recordar lo bueno... Y decir No, no salto y decir Sí, sí vivo.. y dar un paso atrás.. es mentira lo que dicen de que dar un paso atrás no es bueno, depende...

Nada de coger el camino fácil, mienten... Ese es el difícil, el enredado.. duelo, de quien no supo ayudarte, culpa de quién no vió esa señal...

Ayuda, una palabra, un acto, valentía para pedir ayuda... Cambiar, lo que haya que cambiar... Lucha... Por la Supervivencia... Vida, sueño, esperanza, anhelo, objetivo, lucha, sentido, búsqueda... reajustar esos sentidos, quizás estén confundidos, sean irreales, ajustar.

El tiempo no es oro, el tiempo es vida, vida sencilla, amor, amistad...y una mano amiga, y una oportunidad... El sonido de un corazón que late.

 

MC Tello

 

LA HUMANIDAD EN LAS PALABRAS

 He construido mi vida basada en las palabras.
Las que susurraba a mis hijas para que durmieran, las que salen directo de mis dedos cuando escribo, las que he pronunciado en mis treinta y ocho años de docencia a niños que hoy ya no lo son, las que no puedo pronunciar cuando no puedo decir lo que pienso y que la prudencia me aconseja no verbalizar.
Las que he pronunciado de forma inadecuada para luego arrepentirme, las no dichas a mis seres queridos....
Pero ¿ para qué sirven las palabras?
No lo tengo claro. Dicen los lingüistas que ayudan en la comunicación. Pero en el mundo de hoy, a veces, la comunicación es una ficción. Todo el mundo habla, pero nadie escucha.
Accedemos a toda la información en tiempo real, pero hemos dejado los sentimientos enredados en los cables de la electrónica y nunca se convierten en diálogo creativo.
Quisiera rescatar el verdadero significado de las palabras, que sean sinceras, que no oculten verdades, que los seres humanos volvamos al diálogo creativo de doble vía.

Quisiera volver a rescatar la humanidad de las palabras.

 

Rosa Teba

 

FATÍDICA SORPRESA

 

Laura, con los ojos llenos de lágrimas, se montó en el coche y lo puso en marcha. No sabía a dónde ir.

Por la mañana Tony le había mandado un mensaje diciendo que tenían que verse para hablar de algo muy importante. Ella pensó entonces que sería para hacer planes para el puente que se avecinaba; a ella le apetecía una escapada romántica a un sitio tranquilo, estaba un poco estresada, trabajaba demasiado, le había dicho él.

...

Pero no, no era para eso.

Tony, sin preámbulos y sin apenas darle explicaciones, le dijo que lo sentía mucho pero que ya no la quería, que había otra mujer en su vida, y que lo mejor era cortar la relación antes de que se hicieran más daño.

No podía creer lo que estaba oyendo, a Laura no le salían las palabras. No se puede dejar de querer a una persona de la noche a la mañana.
Habían vivido momentos inolvidables, se querían mucho. Tony era tierno, atento, cariñoso, sabía escucharla cuando ella estaba preocupada o enfadada por algo.

No podía entenderlo. Ella no había notado nada o ¿no había querido darse cuenta?
Las palabras "ya no te quiero" resonaban en su cabeza una y otra vez. Como un soniquete interminable y ensordecedor

 M.Carmen Martos

 

Entre papeles de bancos y facturas, recojo del buzón el anuncio de unas sesiones para mejorar la comunicación oral. Desconozco el alcance de los milagros que promete, pero me ha hecho reflexionar sobre el reverso de la moneda, la comunicación escrita, la habilidad de transmitir, sin otro apoyo que dé mayor fuerza al mensaje.

Y, entonces, me vienen a la cabeza distintas ocasiones en las que la palabra no es una simple huérfana de gestos sino auténtica soberana.
Qué fortaleza t...ransmite esa amiga que, en momentos de angustia, te dice «tranquila»! Y no es menor el raudal de cariño que provocan las notas ocultas por la madre en la maleta de estudiante.
Se nos abre la mente con una tertulia sobre poesía. Un libro de (casi) nuestro Saramago es capaz de provocarnos gran ternura. El mundo se hace más justo cuando el hombre es capaz de plasmar por escrito los Derechos del Niño.
Tenemos suerte de tener esta herramienta. Lástima que a veces se use para dañar, discriminar o anular al otro. En esos casos, los humanos deberían ser rebajados de nivel y ser privados de la palabra, dejarlos relegados al simple rebuzno o ladrido animal.

 

Inmaculada de la Torre

 

En esta vida se me han presentado momentos en los que las palabras sobran; otros en los que por más que te empeñas nunca dices las adecuadas o, lo que es peor, las que quieren ser escuchadas aunque no sean verdaderas.
Pero me gusta el diálogo, y eso sin las palabras no es posible.
Hay veces que las palabras son sinceras, otras, mejor no escucharlas.
He presenciado situaciones en las que las palabras han tenido que venir a mí, no encontraba qué decir, ¡qué apuro!... Se me ha...cen nudos en la garganta pero al final, haciendo de ellas un juego, he conseguido lo que yo quería, que la persona que me escucha reciba un mensaje que llevar a la práctica y así poder ver la vida de diferente forma.
Una palabra dicha con serenidad a una persona que necesita escuchar algo diferente le puede alegrar un mal día, solo una. El único empeño que tienes que poner es que salga del corazón.

 

M.Carmen Ocaña